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Reducir el estrés de la transición laboral

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Haz un “rebranding” de ti mismo
Antes de empezar a enviar CV, puede que necesites un “rebranding” personal. Actualiza tu CV y tus perfiles en las redes sociales para crear una marca personal que resulte atractiva a los posibles empleadores y potencialmente relevante para sus necesidades. Echa un vistazo a las distintas áreas en las que has destacado en tu carrera académica y profesional. Dependiendo de tu experiencia, es posible que tus éxitos se hayan logrado en funciones de voluntariado o experiencia laboral profesional. Prestar atención a estos detalles te ayudará a identificar lo que te interesa y cómo podrías destacarlo en tu CV para una nueva carrera.

Realiza entrevistas con profesionales de tu campo de interés
Puedes encontrar, a través de conocidos o del lugar donde estudiaste, a quienes trabajan en puestos que te interesan y en campos que te atraen. Así podrás hacerte una mejor idea de lo que se espera de ti en el trabajo.

Identifica las lagunas en tus conocimientos y habilidades
Haz una lista de las habilidades que necesitas mejorar o adquirir. Cuáles son importantes para tu objetivo profesional y cuáles te faltan. A continuación, elabore un plan de formación: puede consistir en hacer cursos y cursillos de actualización o realizar unas prácticas.

Pide opiniones a colegas y amigos
Para obtener un retrato más preciso, pide a tus colegas, amigos y conocidos que compartan sus opiniones sobre tus puntos fuertes y débiles. Puede que en sus respuestas encuentres características recurrentes que te resulten cercanas.

Sé realista sobre tus objetivos
En algunos casos, encontrar el “trabajo soñado” puede llevar mucho tiempo. Y merece la pena prepararse para ello, tanto financiera como mentalmente. “A veces las transiciones profesionales son improbables a corto plazo. No te predispongas al fracaso fijándote objetivos poco realistas en plazos poco realistas”, aconseja Amitabh. – Ten un plan alternativo. Piensa en una alternativa a la que puedas recurrir cuando las cosas no vayan como esperabas o habías planeado. Puede ser algo intermedio entre tu máxima aspiración y tu estado actual”.

Transición coherente
No te apresures a proclamar a bombo y platillo que dejas las finanzas, el marketing, la medicina y cortas todas las conexiones que podrían resultarte útiles de forma inesperada. Asimismo, si has decidido convertirte en empresario, no te apresures a declarar que trabajar por cuenta ajena no es para ti. Date tiempo para hacerte una idea del nuevo puesto y campo y ver si es para ti o no.

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